Lo que no se ha sabido hasta ahora del Fondo de Inversión Municipal de 8.000 millones de euros aprobado por el Gobierno es que los alcaldes españoles podrán adjudicar a dedo las obras municipales que ejecuten en 2009 con cargo a esa financiaciación.
El rápido crecimiento del paro ha animado a impulsar pequeñas y medianas obras en todos los ayuntamientos con el fin de estimular la contratación de los numerosos desempleados de la contrucción. Quieren hacerlo muy rápido. Tanto que permitirán a las corporaciones municipales adjudicar directamente las obras si así lo quieren.
Con el argumento de que es necesario relanzar lo antes posible la actividad, permiten prescindir de la Ley de Contratos del Estado para adjudicar cualquier obra financiada con este Fondo. La mayoría de los ayuntamientos tienen muy agotada su capacidad de inversión. Buena parte de su actividad se financiará en 2009 con este recurso estatal, que les posibilita contratar inmediatamente con la empresa que quieran.
Habrá ayuntamientos y alcaldes que prefieran seguir contratando de acuerdo con la ley: solicitando ofertas y adjudicando a la más barata o a la mejor. Pero aquellos acostumbrados a abusar del procedimiento de adjudicación directa ahora lo tienen más fácil. Al no haber concurrencia, no se abaratan los costos de ejecución. Y, además, se hará más fácil el cobro de comisiones por parte de aquellos municipes menos respetuosos econ la ética.
En el artículo tercero del Real Decreto 9/2008 de 28 de Noviembre se ha introducido una simple frase que destierra por un año la Ley de Contratos en los más de 8.000 ayuntamientos españoles. Dice así: "La licitación de las obras se realizará por cualquiera de los procedimientos previstos en la Ley de Contratos del Sector Público, abierto, restringido o negociado,con o sin publicidad, o serán tramitadas como contrato menor".
El contrato menor no tiene otro requisito que pagar la factura que presente el contratista. Desde el mismo día en que el Ministerio le de la conformidad al proyecto municipal, el alcalde de turno puede encargar a cualquiera la realización de obras, que pueden ir desde los 6.000 a los 5 milllones de euros. Un Ayuntamiento de mil habitantes podrá acceder a una financiación de aproximadamente 180.000 euros. Unio de 100.000 vecinos dispondrá de 18 millones de euros. Todo ello financado con cargo a la deuda pública.
El Gobierno de España quiere que esta financiaciación sea para nuevos proyectos, que no esten contemplados en los presupuestos de 2009. Es un chiste, porque no existe ningún presupuesto aprobado. Los ayuntamientos sólo tienen que eliminar del anteproyecto de presupuestos de 2009 las obras que deseen financiar con este nuevo Fondo. Los más empobrecidos sólo ejecutarán esos proyectos el año que viene. Y el resto se endeudarán menos. De esta forma, el Gobierno ha facilitado un ahorro a los ayuntamientos. La revitalización económica que pretendía con esta inyección de 8.000 millones euros a la economía real será por lo tanto inferior a la que se hubiera producido de haber sacado este paquete dinamizador en el mes de octubre pasado (cuando aprobó las inmensas ayudas a la banca) o en el mes de marzo del año que viene. Ha aliviado las cuentas municipales, pero su impacto en la economía será menor.
Este nuevo decreto rompe la cultura del rigor en la contratación pública. No hay duda de que a aquellos ayuntamientos que obran bien, a los que buscan la mayor economía y eficacia en sus actuaciones, les viene a romper también corses burocráticos y a faciltar las cosas. Pero legaliza las malas prácticas de aquellos que conciben el poder municipal como la oportunidad de favorecer a los amigos y quizá, de paso, pillar alguna comisión.
Desde el mismo mes de enero podrán a ejecutarse las obras . Habrá que estar atento a la evolución del paro en la construcción. Si no se reduce un ápice, habrá supuesto un balón de oxígeno a los ayuntamientos, pero no habrá respondido a su principal objetivo : relanzar el empleo en un sector que pasa por sus momentos más críticos.
Entradas
